Si tienes un pequeño cuarto de lavado, no hay forma de negarlo que necesitas una lavadora apilable. Tener una lavadora y una secadora lado a lado es, sencillamente, desaprovechar demasiado espacio que podría ser utilizado de otra forma. Sin embargo, si esta gran inversión no está en tus planes a futuro ¡tienes suerte!. Con alguna decoración única e ideas de almacenamiento, puedes aprovechar tu pequeño cuarto de lavado y convertirla en una central eléctrica eficaz y con estilo.
1. Convierte las partes de arriba en estantes
Las partes de arriba de la mayoría de los electrodomésticos no se usan. Sin embargo, casi siempre son planas y pueden ser el estante perfecto para almacenar todas tus necesidades de lavandería. Si puedes meter tu lavadora y secadora debajo de una encimera, entonces el trabajo ya está hecho. Si no, utiliza algunas tablas de madera para nivelar la parte superior y que quede una superficie plana que sea perfecta para canastas de ropa, detergentes y decoraciones del cuarto de lavado, tú decides.
2. Esconde el desorden con cortinas ingeniosas
Es inevitable el desorden en un lugar pequeño. Después de todo, tienes muy poco espacio para almacenar todos los artículos. Esto es particularmente cierto para pequeños cuartos de lavado, porque “lavandería” casi siempre va con desorden. Tienes calcetines sucios, máquinas enormes, detergentes, suavizantes, canastas y otros materiales de limpieza almacenados en esta pequeña área. Ya que es difícil ser eficiente en un espacio desordenado y tirado, perfecciona el talento de esconder el desorden con ingeniosas cortinas. Cuelga una varilla de cortina arriba de tu lavadora y secadora y disfraza el desorden con estilo mientras luchas con una torre de ropa sucia. No tendrás que preocuparte que se presenten invitados inesperadamente ¡el día de lavar!
3. Aprovecha el espacio vertical
Con un rápido vistazo alrededor de tu casa, notarás rápidamente mucho espacio de pared sin usar. Cuando estés decorando un cuarto pequeño es importante aprovechar el espacio vertical, ya que liberará espacio valioso pero limitado. Cuelga canastas, estantes y hasta un bote de basura. Mientras más cosas puedas poner en tu pared, más aprovecharás todo el espacio.
4. Disfraza los detergentes en contenedores con estilo
Las botellas de detergentes son grandes y estorbosas. Ocupan mucho espacio y definitivamente no ayudan al diseño interior de tu cuarto de lavado. Sin embargo, los necesitas para facilitar el proceso de lavado y secado. Lo que probablemente no sabes, es que puedes disfrazar los detergentes en contenedores con estilo que reanimarán el espacio y minimizarán los estorbos. Dirígete a la tienda de un dólar y escoge contenedores de vidrio, diferentes formas y tamaños, llénalas con todos los artículos indispensables del cuarto de lavado. Etiquétalos como sea necesario (porque utilizar blanqueador en lugar de detergente es un error que nadie quiere cometer), y nunca más sufras con la idea de que gotea el jabón desde los contenedores grandes y estorbosos.
5. Esconde las canastas de ropa en alacenas
Una de las ideas más ingeniosas para almacenar en cuartos de lavados es esconder en alacenas las canastas de ropa. Son grandes, estorbosas y ocupan mucho espacio de piso. Así que, pon manos a la obra para lograr esta distinguida opción de almacenaje e inmediatamente liberarás espacio de piso, mientras que esconderás un desorden inevitable y no deseable el día de lavado. Otra alternativa es colgar bolsas de tela para lavandería, o usar botes de almacenaje vertical para minimizar la cantidad de espacio que estos artículos indispensables ocupan.
Aunque nunca lo pensaste posible, empezarás a ver con entusiasmo el lavar ropa en tu nuevo cuarto de lavado con estas opciones eficientes y con estilo.